¿Qué es la libido?

¿Qué es la libido?

La libido es el deseo o apetito sexual de una persona. Puede verse afectada por las hormonas, el estado mental, el estrés, el cerebro y los patrones de comportamiento.

La libido de cada persona es diferente, y el deseo sexual puede fluctuar con el tiempo, dependiendo de las circunstancias. Se trata de algo totalmente normal.

La frecuencia e intensidad de las relaciones sexuales varía, como es natural, de una persona a otra. Lo que para algunos es insuficiente, para otros puede ser lo normal. Tener poca o mucha actividad siempre es algo relativo, y en esta perspectiva influye tanto la propia apreciación como la que siente la pareja.

Veamos cómo puedes aumentar tu apetito sexual de forma natural.

Disminuye tus niveles de estrés

Las causas de un impulso sexual escaso o que se presenta de forma esporádica son muchas, pero quizá el estrés sea una de las que aparecen con más frecuencia. Tanto si es crónico como si es agudo, puede afectar al desempeño. Los altos niveles de ansiedad pueden deberse al estilo de vida, a causa de las presiones sociales, familiares o laborales, o bien guardar relación con el sexo de forma exclusiva.

Por otra parte, el estrés produce insomnio, fatiga y falta de concentración, síntomas que no ayudan a gozar de las energías físicas y psíquicas necesarias para mantener relaciones sexuales. En cualquier caso, a los hombres les puede costar mantener una erección, y a las mujeres llegar al orgasmo.

Para manejar la ansiedad es mucho lo que puedes hacer. Una de las maneras de ayudar a disiparla es establecer una comunicación abierta con la pareja, lo que es de gran ayuda para poner las cosas en su justa perspectiva y que cada parte comprenda las expectativas del otro.

Llevar una vida saludable es otra manera de controlar los niveles de estrés y aumentar el deseo sexual. Al respecto, puedes cambiar tus hábitos con el fin de conseguirlo. Estos son algunos consejos para llevar una vida saludable:

Consume alimentos saludables.

Practica algún ejercicio vigoroso de forma rutinaria.

Duerme lo necesario.

No fumes, ni bebas alcohol en exceso.

Mantén el peso correcto.

Mejora las relaciones interpersonales.

Reserva todos los días un tiempo para ti.

Con el yoga, el mindfulness o alguna otra disciplina similar lograrás relajarte.

Evita lo predecible

La rutina, la falta de estímulo y la monotonía pueden ser causa de pérdida de la libido. El deseo poco a poco se va erosionando y ya no existe la pasión de los primeros días. Quizá la mejor manera de mejorar la experiencia sexual sea ir más allá del acto en sí. Muchas actividades sexuales no tienen relación directa con el coito, pero enriquecen la relación.

Prolongar los preliminares es especialmente importante para la plena satisfacción sexual en las mujeres. Los besos y las caricias que progresivamente se hacen más íntimas son determinantes en muchos casos para llegar al orgasmo.

Compartir con frecuencia tiempo de calidad ayuda a estrechar los lazos y a acumular experiencias divertidas o gratas. Acordar citas como era costumbre al inicio de la relación puede ser un aliciente, además de la excusa perfecta para iniciar nuevas actividades, tales como asistir a actos culturales o competiciones deportivas.

También es útil intentar redescubrir a la otra persona. Muchos aspectos de la pareja se olvidan con el paso de los años, y además la gente cambia y a veces no nos damos cuenta. Mirar con ojos nuevos es otra manera de despertar el interés.

Amplía y profundiza las actividades sexuales

El sexo no tiene que estar limitado a la habitación. Una simple caricia inesperada en cualquier lugar es una manera de decir que existe deseo e interés.

Enriquecer la experiencia es otra manera de aumentar el deseo sexual. Los lubricantes para disfrutar mejor del sexo, hacer posturas inusuales, un masaje, los juegos de roles, un striptease, los juguetes eróticos, el sexting y el sexo tántrico son maneras de tornar la actividad en algo impredecible y divertido. También, si es posible, puede ser muy estimulante cocinar, atender el jardín o practicar yoga con poca ropa.

Recurre a los mejores productos naturales

Ciertas plantas y algunos remedios caseros pueden ser de utilidad cuando se busca compensar una disminución de la libido. Muchas de ellas son vigorizantes, ya que proporcionan energía adicional, con lo que estimulan las funciones mentales y orgánicas. El consumo prolongado de estas plantas bien sea de forma original o como complementos alimenticios, puede optimizar tu desempeño sexual y avivar el deseo.

Otro efecto sobre el sistema reproductor es aumentar la motilidad y el conteo de los espermatozoides. Adicionalmente, tiene un efecto estimulante sobre las glándulas del sistema endocrino, especialmente las suprarrenales.

secreciones de las glándulas endocrinas, combate el estrés, las afecciones circulatorias y la falta de deseo sexual en la mujer.

Otros factores que te ayudarán a aumentar la libido

La libido y el deseo sexual pueden variar de persona a persona y pueden ser afectados por una variedad de factores, incluyendo el estrés, la salud física y emocional, los cambios hormonales y los problemas de relación. Sin embargo, hay algunas medidas que pueden ayudar a aumentar la libido y el deseo sexual.

Practica ejercicios regulares: El ejercicio no solo mejora la salud física en general, sino que también puede aumentar los niveles de testosterona en el cuerpo, lo que a su vez puede aumentar la libido y el deseo sexual.

Duerme lo suficiente: El sueño es esencial para la salud física y emocional, y una falta de sueño puede afectar negativamente la libido y el deseo sexual.

Consume una dieta saludable: Una dieta saludable, rica en frutas, verduras y proteínas, puede ayudar a mejorar la salud física y emocional, lo que a su vez puede aumentar la libido y el deseo sexual.

Hablar sobre los problemas de relación en caso de tenerlos: Si los problemas de relación están afectando la libido y el deseo sexual, es importante hablar sobre ellos con un terapeuta.

El médico y el sexólogo

En algunos casos, la falta de deseo se debe a problemas médicos o psicológicos que afectan a la salud sexual. Las enfermedades crónicas, las deficiencias hormonales, ciertos fármacos o los problemas de irrigación sanguínea de la pelvis deben consultarse con un especialista.

Cuando hay una disfunción sexual, como el vaginismo, la erección insuficiente o la anorgasmia, puede serte útil la ayuda profesional de un sexólogo o terapeuta sexual.

La disfunción eréctil se trata con medicamentos que aumentan el flujo sanguíneo en el pene. También es posible compensar las deficiencias glandulares utilizando terapia hormonal para elevar los niveles de testosterona.

La disminución de la actividad sexual femenina puede deberse igualmente a alteraciones hormonales. La terapia tópica con cremas o supositorios vaginales aumenta la irrigación sanguínea local y eleva la libido en las mujeres menopáusicas.

En definitiva, la mejor manera de aumentar la libido es llevar una vida saludable, lo que incluye complementar tu dieta para que sea muy rica en nutrientes. Las plantas y las sustancias que nos proporcionan son un recurso muy valioso para alcanzar una vida sexual plena.